Carrousel de escándalos

Qué lejos queda el fútbol desplegado por Zinedine Zidane ante Brasil en el 2006, mucho más lejos aún la calidad y el toque distintivo de Michel Platini. La selección francesa arribó a Sudáfrica envuelta en el revuelo que fue su clasificación con aquella mano de Thierry Henry. Con jugadores claves como Karim Benzemá fuera de los 23 y su entrenador envuelto en un sinfín de críticas y descalificaciones.

La expulsión de Anelka es inédita en el fútbol mundial, escasa capacidad de resolver los conflictos puertas para adentro. Todo lo contrario, los galos en esta copa se caracterizan por sacar los trapitos al sol y hacer mas escándalos que jugadas de gol. Como si todo esto fuera poco, Evra el talentoso lateral del Manchester United se peleó con un integrante del cuerpo técnico.

Se dice que los jugadores no quieren entrenar, se dice que Domenech sabe mas de astrología que de fútbol, y que el signo de Benzemá sería motivo suficiente para excluirlo. Que Henry le maneja el equipo y que no toleran a Gourcouff.

¿Cómo una selección como la francesa puede estar envuelta en estos berenjenales? Al borde de la eliminación y con conflictos, no queda nada de aquellos talentosos números diez que nos deslumbraron.