Cambalache

La vigencia y actualidad que tiene el tango de Enrique Santos Discepolo es tan asombrante como alarmante, pareciera que fue escrito ayer. Pero no, más bien habla de toda una historia moderna de cambalaches. En la Asociación del Fútbol Argentino parecen estar rindiéndole tributo a este querido tango.

Lejos de reunirse, analizar y planificar el futuro de la selección Argentina hoy los dirigentes y el máximo dirigente, mas bien el capo di tutti capo están volcados a apantallar o apagar (según convenga) el fuego que encendió Maradona en su conferencia de prensa la pasada semana. Se desató una querella al mejor estilo talk show donde hubo dimes y diretes, amenazas de hablar, de "prender el ventilador y salpicar a todos". Lamentable.

Ayer en el colmo de los colmos Bilardo se atrevió a decir que existe aún una chance de que Maradona continúe al frente de la selección, lo que claramente suena demencial tras la semana de declaraciones explosivas y la decisión de Maradona. Pero recordemos que en el mundo AFA todo vale y todo pasa.

Grondona salió a decir que Bilardo no iba a hablar, sin ser vocero ni padre del doctor pareciera que maneja a su gusto los tonos y los contenidos de las declaraciones este "noble ferretero".

Cuando parecía que de esta tormenta podíamos librarnos del presidente perpetuado en el poder y comenzar un camino de prosperidad y planificación seria y coherente, ¡pum! nos topamos con la dura realidad. Nada ha cambiado, se hará lo que haga falta para que no salga a la luz lo que todos sospechamos y las cosas seguirán como siempre, en definitiva todo pasa.