Ley del ex

En estos tiempos está muy de moda la famosa "ley del ex", la misma implica que un jugador le marcará al equipo al que jugó en alguna oportunidad. Lo llamativo es que la situación se da con frecuencia, incluso en jugadores con no tanto poder de gol, como hace algunas fechas fue el caso de Mercado quién le convirtió a Racing.

Uno de los motivos que propician la eficacia de la ley del ex es la constante rotación de los jugadores por los clubes, hay jugadores que han vestido varias camisetas y es frecuente que le marquen.

Una de las consecuencias curiosas de esta ley del ex es que los jugadores que anotan el gol deciden no festejarlo, hasta ahí llamativo pero comprensible. Pero ahora aparentemente está de moda pedir perdón a la popular rival por el puñal clavado (no es el caso de Pastore en la foto que pide disculpas por ser expulsado por protestar).

Yo soy partidario de que todos los goles deben festejarse, marcar un gol es muy difícil y una sensación increíble que no debería ser reprimida. Puedo entender, por supuesto, que Martín Palermo no grite su gol a Estudiantes porque sólo jugó en dos clubes en Argentina y tiene sentimientos de gratitud para con los platenses. Pero recuerdo en este momento a Germán Denis, que jugando para Independiente no festejó los goles ni contra Arsenal ni contra Colón, y encima pedía disculpas. Lo mismo hizo "el gordo" Núñez en aquella tarde fatídica para Independiente y heroíca para Argentinos. Nuñez clavó un gol infernal olímpico y lejos de festejarlo pidió disculpas a la parcialidad local.

Yo me pregunto ¿cómo se sienten los hinchas del equipo que convierte al ver que su goleador no sólo no celebra si no que pide perdón a la parcialidad rival? ¿Es justa esa ingratitud para con el club que ahora está pagando un sueldo por los servicios del jugador? ¿cuánto hay de demagogia en esa acción?

Los goles son para festejarlos, no creo que sea una ofensa para el ex club. Siempre y cuando sea un festejo convencional y respetuoso.