La historia de Mourinho es de película, comenzó como interprete de Van Gaal (el castellano de Louis no es su fuerte, recomiendo "el rap de Louis" en el archivo de este blog), luego tuvo su oportunidad de conducir al Porto con quien ganó la Champions, saltó al estrellato con el Chelsea y ganó todo con el Inter. El Real Madrid abrió su billetera y le ofreció el mejor salario del mundo para contrarrestar a su clásico rival culé en la consecución de títulos. Por supuesto que en medio de esta brillante carrera como entrenador se da la construcción del personaje Mourinho, quién parece no tener medida con tal de ganar (¿el fin justifica los medios Mou?), declaraciones explosivas y bastante egocentrismo.
El caso de Guardiola es mucho mas simple, pero a la vez me gusta más. Talentoso volante y hombre de la casa, comenzó trabajando en la cantera del Barcelona. Ya en sus épocas como jugador se lo conocía como un estratega y un hombre con amplios conocimientos tácticos. Se hizo cargo de los blaugranas tras el alejamiento de Rijkaard quién le dejó una base interesante y un buen trabajo, y como el conjunto catalán es un CLUB (con todas mayúsculas) con un proyecto serio, Pep continuó el trabajo del holandés, y lo mejoró. Con un amplio equipo de trabajo (tiene 16 colaboradores) es un obsesivo de la posesión de la pelota y el toque y la descarga. Las características de su plantel y la filosofía del club hacen que Guardiola sea el director perfecto de una orquesta que cada día suena mejor.
Mou visitó el Nou Camp el año pasado en semi finales de Champion, la expulsión temprana de Thiago Motta lo obligó a refugiarse para resguardarse de un Barsa que entraba por todos lados, eso le valió la reprimenda generalizada pero a la vez el pase a la final. Hoy Pep y Mou se vuelven a ver las caras, si bien el Madrid está jugando muy bien y es el equipo mas goleador de la Liga, chocan dos estilos, dos formas de ver y vivir el fútbol. Veremos como resulta el marcador.
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