Vélez jugaba el fin de semana contra River, entonces Bielsa dispusó una serie de ejercicios con mucho desgaste físico para Posse, para trabajar específicamente la recuperación y tapar la subida de Juan Pablo Sorín. Al delantero se lo notaba incómodo, y se lo hizo saber al entrenador
- "Marcelo, me siento mal. Para mi es un esfuerzo muy grande el que tengo que hacer para perseguir al rival. Siento que pierdo fuerza y me desgasto demasiado en algo que no es mi función principal"
- "No hay problema Martín, si arregla con Sorín para que no pase al ataque en todo el partido no hay ningún problema"
*Extraído del libro de Román Iutch "Marcelo Bielsa, el último romántico"
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