Una de las idioteces mas grande que escuché en el fútbol es aquello de "del segundo nadie se acuerda", los ignorantes que pregonan dicha infamia no deben haber visto nunca a La Naranja Mecánica del 74, motivo que los descalifica bastante como para denominarse amantes del fútbol.
El torneo que hizo Vélez fue maravilloso, con la bandera del juego asociado y la potencia goleadora dio pelea hasta el final. A lo largo de todo el torneo se mostró como un equipo sólido, compacto y con mucho hambre. Su sobriedad defensiva era coronada por la potencia y el talento de sus goleadores. Lamentablemente campeón hay uno solo por torneo, y esta vez le tocó al pincha. Pero esto no empaña en absoluto el enorme trabajo realizado por el conjunto de Gareca.
Un equipo que representa a una institución ejemplar, con grandes jugadores y con un entrenador que jamás se aburguesó ni descansó en el éxito conseguido tiempo atrás. Ricardo Gareca terminó la mayoría de los encuentros con 3 delanteros en cancha, y siempre apostando a salir a buscar. Nunca se refugió atrás y siempre hizo un culto del buen juego.
En ese fatídico partido que no pudo entrarle por ningún lado a Gimnasia (paradojicamente acérrimo rival pincharrata) quizás haya perdido el campeonato. Pero todos, o por lo menos yo y varios mas, recordaremos a este Vélez que siempre fue para adelante, que luchó hasta el final, y sucumbió ante otro gran equipo. Como siempre pregona Bielsa, no se debe analizar sólo el resultado, es importante valorar el proceso.
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